Guía práctica para interpretar progresiones secundarias y aplicarlas al horóscopo actual
Las progresiones secundarias usan un día por año para mover planetas y mostrar cómo evoluciona la psique natal con el tiempo.
Las progresiones pueden activar el Sol, la Luna o el ascendente, destacando temas interiores y momentos de transformación personal.
Calcula la posición progresada sumando días desde el nacimiento: un día equivale a un año, mostrando estados psicológicos actuales.
Mercurio agiliza la mente, Venus el afecto y Marte la energía; su desplazamiento progresado modifica cómo se viven estas áreas.
Cuando una casa se activa progresada aparecen asuntos vitales relacionados: hogar, trabajo o relaciones toman protagonismo presente.
Conjunciones y aspectos clave progresados indican puntos de énfasis psicológico; su orbe y naturaleza determinan la intensidad.
La superposición de progresiones y tránsitos resalta periodos críticos o favorables; mirar ambos ofrece más precisión temporal.
Si una progresión aproxima un planeta al ascendente, la expresión externa y la identidad pueden cambiar notablemente durante ese año.
Mantén la sensibilidad al aconsejar: las progresiones hablan de procesos internos, úsalas como guía, no como sentencia inmutable.