Guía breve con técnicas seguras y sencillas para iniciarte en viajes astrales guiados paso a paso.
Antes de intentar, crea un espacio seguro, apaga distracciones y prepara una intención clara y serena.
Respira lenta y profundamente, alargando las exhales para bajar el ritmo y sentir el cuerpo más ligero.
Imagina un puente luminoso que conecta tu habitación con un espacio sutil, seguro y acogedor.
Invoca una guía o define una intención protectora que te acompañe y te mantenga centrado y tranquilo.
Atiende señales sutiles: cosquilleo, presión o cambio térmico, que indican el avance del proceso.
Visualiza una cuerda o ancla de luz que te conecta a tu cuerpo, asegurando un regreso confiable.
Siente vibraciones crecientes sin temor; mantén calma y permite que la conciencia se eleve suavemente.
Deslízate por el puente imaginado, dejando el cuerpo dormido y la mente despierta para explorar con calma.
Vuelve con paciencia, restablece la respiración y anota sensaciones antes de abrir los ojos por completo.